The Royal Institution of the Great Britain fue creada en 1799 para la difusión del conocimiento y para la aplicación en la vida diaria de los inventos.
Allí trabajaron eminentes científicos. Algunos de ellos fueron galardonados con el Nobel. Y son famosas las conferencias que se imparten, en Navidad, para niños, con el fin de que se familiaricen con la ciencia y los inventos.
La visita a esta significativa institución me retrotrajo a los años del Instituto en Cangas de Onís, en donde aprendimos de memoria la tabla periódica de los elementos, pues, en la Royal Institution, fueron descubiertos diez de éstos: potasio, sodio, bario, calcio, cloro, magnesio, estroncio, yodo y argón.
Aquí fue en donde Faraday realizó investigaciones sobre electricidad, magnetismo y química.
Y aquí también el clérigo Humphry Davy inventó la primera lámpara de seguridad para las minas, con la que se evitaron explosiones trágicas bajo tierra y la que es uno de los símbolos de la región asturiana.



Primera lámpara de seguridad para la mina

